Brote

Afirmar que los datos del desempleo del pasado junio no son especialmente buenos ni promisorios supone casi invocar una condena. Pasmosamente encuentra uno gente adulta y dotada con un cociente intelectual más o menos normal que casi exige prescindir de cualquier actitud crítica. Nada de cuestionar los datos del desempleo, malditos cenizos, nada de pretender ironizar – y aquí se puede utilizar, he visto utilizar, expresiones insultantes como progre o intelectual – el heroico triunfo de la selección española de fútbol. Nada de abrir los ojos en medio de la oscuridad: los niños saben lo que hacen cuando cierran fuertemente los párpados al descubrir la negrura de la noche. El miedo político y social tiene estos efectos, entre otros más graves, de los que probablemente no nos vamos a librar: la dimisión de cualquier espíritu crítico y la explosión de un pentecostés de esperanzados. Los 98.000 nuevos empleos creados en junio merecen abrir los ojos, no cerrarlos; un análisis crítico, no un ridículo suspiro de satisfacción, porque, entre otras cosas:

a) El paro ha aumentado en el primer semestre de 2012 más que en el mismo periodo de 2010 y 2011.

b) Desde el pasado enero el desempleo ha aumentado en más de 192.000 personas en España.

c) En el último año –divididos casi equitativamente entre gobiernos del PSOE y del PP – el desempleo aumentó en más de un 60%; de 2.300.000 a más de 3.600.000 personas.

d) Junio es tradicional y estacionalmente un buen mes para el empleo: el comienzo de la temporada turística de verano.

e)  El cambio de regulación laboral de las empleadas de hogar ha supuesto la creación administrativa de unos 25.000 empleos ya existentes.

f) Corregidos los factores de estacionalidad el desempleo asciende hasta casi 19.000 personas.

g) Es muy estúpido suponer, siquiera hipotéticamente, que si el PIB no alcanza un mínimo de un 2% anual puede crearse empleo en este país; las previsiones, tanto de los organismos internacionales como del Banco de España y el propio Gobierno señalan que el Producto Interior Bruta decrecerá aun más en este trimestre, confirmando un nuevo ciclo de recesión económica.

No se trata únicamente de no perder la perspectiva de la horrenda y compleja realidad. Se trata, igualmente, de no conceder ninguna reputación gestora  o credibilidad política a un Gobierno que, dentro de un par de días, anunciará nuevos recortes presupuestarios y subidas impositivas y que, amparado por datos de empleo supuestamente positivos, los presentará como aval de la estrategia de su política económica y fiscal y de su destrucción deliberada de los sistemas públicos de sanidad y educación. Imagínense ustedes un nuevo zarpazo de 300 o 400 millones a la Hacienda Pública canaria y se harán una idea de lo que trae en las entrañas este brote verde vendido como la primera cosecha de Mariano Rajoy y Asociados.

Publicado el por Alfonso González Jerez en Retiro lo escrito ¿Qué opinas?

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